La importancia de la valoración pre anestésica

service

Precisamente en el mes de octubre se  celebra el día del anestesiólogo, y es una celebración de carácter mundial,  sin embargo a mi manera de ver más que un día dirigido a honrar el ejercicio de la especialidad, de lo cual estoy muy agradecido, es un día para celebrar uno de los descubrimientos más importantes de la era moderna,  “la anestesia”; un 16 de octubre de 1846, en la ciudad de  Boston en Massachusetts  se realiza la primera cirugía bajo anestesia, así lo registro la historia;  para quienes cuando llegamos al mundo la anestesia ya era una realidad, puede que sea algo más que hace parte “normal” del mundo en el que vivimos, todo ello hasta que, Dios….., ¡necesitamos un procedimiento bajo anestesia!

Desde sus comienzos el ejercicio anestésico fue eficiente para aliviar el dolor durante la cirugía, pero con el pasar del tiempo otros retos  fueron apareciendo, como por ejemplo,  hacer de la anestesia una especialidad, monitorizar de manera más eficiente las funciones vitales y la profundidad anestésica durante la cirugía, el manejo del dolor postoperatorio, tener cada día mejores  medicamentos para poder escoger el más indicado según el momento, máquinas de anestesia más seguras,  etc. ,  y en estos aspectos y muchos otros se lograron espectaculares avances;  sin embargo en las últimas décadas ha surgido un especial interés porque los sistemas de salud a nivel mundial apliquen políticas de seguridad en el ejercicio de la atención a los pacientes, lo que agrego a la anestesia un nuevo reto, generar estándares para realizar cirugías cada vez más seguras, no solo en el intraoperatorio, sino en el preoperatorio y el postoperatorio.

Desde el comienzo del ejercicio de la anestesia se evidencio que era un acto médico con grandes y potenciales riesgos, y desde que la anestesia se hizo una profesión, las sociedades de anestesia han trabajado en ofrecer a los pacientes una mejor calidad en la atención, es así, que como parte de los estándares de seguridad actuales, se considera la valoración pre anestésica como un elemento indispensable para una cirugía segura, ósea tiene carácter obligatorio.

La consulta  pre anestésica tiene valores agregados al de ofrecer seguridad al acto quirúrgico, ya que al  generar un  primer contacto con la especialidad previo a la cirugía,  permite al paciente tener información de primera mano para despejar sus dudas con respecto a todo lo relacionado con el acto anestésico, esto disminuye la ansiedad del paciente y su familia, y estudios muestran que esto ofrece   un mejor resultado en las intervenciones quirúrgicas.

La consulta  pre anestésica tiene como pilares fundamentales el interrogatorio al paciente y el examen físico, esto, sumado al tipo de cirugía,  nos da  la información suficiente para valorar  la necesidad de realizar exámenes preoperatorios o no , pedir interconsultas a otras especialidades, etc.

Quiero resaltar, después de lo anteriormente expuesto, que el fin primordial de la valoración pre anestésica es establecer “el riesgo” que corre el paciente en relación con la anestesia y el tipo de cirugía, y es en términos de este riesgo en que el paciente mide su ansiedad alrededor del procedimiento, y es igualmente alrededor de este riesgo que el anestesiólogo decide también el tipo de anestesia, monitoria durante la cirugía, necesidad de reservar hemoderivados, necesidad de reservar unidad de cuidados intensivos para el postoperatorio, que medicamentos de los que el paciente toma deben o  pueden ser continuados, etc.

Pero se preguntaran, si establecer el riesgo  es el objetivo primordial de la consulta, este como se obtiene? Bueno, la respuesta a esta pregunta puede ser larga y corta a la vez, la larga se escapa al objetivo de este blog, la corta se resume en  que el riesgo se establece precisamente con los datos obtenidos durante la consulta pre anestésica y el tipo de cirugía;  parece sencillo, pero nos encontramos con mucha frecuencia pacientes, que no saben de que los operaran, que no llevan los exámenes, o que no  se los realizan, que no saben con exactitud que medicamentos toman, las dosis, que nos ocultan información sobre su estado de salud, que no tienen claro a que medicamentos son alérgicos, no tienen datos de primera mano de eventos de salud previos, como infartos cardiacos, hospitalizaciones,  etc

Recalco con frecuencia a mis pacientes, que el día que a uno lo operan, es tal vez uno de los días más difíciles de nuestra vida, y lo es por muchos factores, el solo hecho de estar en un hospital, de que en algo nos sometamos a la desnudez, al frio de las salas de cirugía, que nos hagan heridas, que podamos experimentar dolor, que no podamos comer horas antes, la ansiedad de nuestros seres queridos, nuestras preocupaciones con respecto al trabajo, la incapacidad, etc;  estas cosas son muy importantes, pero también hay que decir, que puede que muchos de nosotros nunca pasemos por una sala de cirugía, no es algo que sea frecuente o normal en la vida de una persona, en resumidas cuentas, “a uno no lo operan todos los días”, pero en tal caso,  y pues obviamente, uno no desea que le pase nada malo; todo esto lo escribo para enfatizar algo: si parte del riesgo de una  cirugía depende de nuestro estado de salud, y la necesidad de una cirugía  la mayoría de las veces es algo que nos coge desprevenidos, tenga en cuenta que:  “SIEMPRE DEBEMOS PROCURAR TENER UN MUY BUEN ESTADO DE SALUD PARA DISMINUIR EL RIESGO CUANDO NOS TIENEN QUE OPERAR”, entonces, no queremos que pase nada malo en una cirugía?, pongamos nuestro grano de arena, controlen sus enfermedades de base, diabéticos, hipertensos, especialmente; cuídense, tengan estilos de vida saludable, realicen  actividad física, controlen su peso, no tengan vicios etc; mejor dicho, “estén listos”, la necesidad de una cirugia puede tocar a nuestra puerta en cualquier momento”,  no se puede reclamar al anestesiólogo  o el cirujano, en términos de riesgo, lo que no se ha sembrado.

Por último, el paciente de la consulta pre anestésica debe salir con claridad sobre:  que tipo de anestesia recibirá según las opciones disponibles, riesgos alrededor del acto anestésico, que puede comer  y cuantas horas antes, conciliar que medicamentos debe o puede tomar, educación sobre cómo se manejara su dolor en el postoperatorio, si la cirugía requiere aplazarse (puede ser por algún resfriado, examen etc), si puede tomar algún medicamento tranquilizante el día previo o el día de la cirugía;  y ojo, muy importante, deben firmar el consentimiento informado, donde por escrito, anestesiólogo y paciente  dejan constancia de que el paciente sabe de sus riesgos de manera amplia y suficiente, y los acepta.

Recordar que la anestesia tiene riesgos que en la mayoría de casos son prevenibles,  y en otros casos no, son una minoría, pero existen, que hay un mínimo riesgo de muerte en un acto quirúrgico y que son inherentes al acto anestésico en sí; también hay que decir que gracias a los grandes avances la anestesia hoy en día es muy segura, tenemos muy buenos profesionales, con muy buenos conocimientos, responsables, con muy excelentes medicamentos, y recursos disponibles para atender a nuestros pacientes.

Espero que este pequeño blog los ayude a comprender mejor la importancia de la visita pre anestésica, que entendamos que el éxito de una cirugía se debe especialmente a que atendamos con especial cuidado este acto médico.

 

Muchas gracias

Nixon Eduardo Duran Ruiz

Anestesiólogo – UIS